En uno de los ferrys que conectan Sunset Park con Manhattan en un día laborable apenas encontramos latinos utilizando el servicio. 

“Yo si no tuviera carro no viniera acá. Y en bicicleta, ¿quién maneja una bicicleta en invierno?”, dijo un pasajero. 

“Si no tiene carro tiene que venir caminando porque sino queda algo retirado de donde están las viviendas”, dijo otro pasajero.

A pesar de que el sistema NYC Ferry tiene dos años navegando las aguas de la Gran Manzana sólo el 36 por ciento de sus usuarios son neoyorquinos de minorías. 

Son datos del primer informe de la Corporación Económica de Desarrollo que gestiona el servicio junto a una empresa privada sobre la utilización del ferry. 

Y muestran que el 64 por ciento de los pasajeros son de raza blanca y de clase media, con ingresos anuales de entre 75 mil dólares y 99 mil dólares.

“Creo que siempre hay una falta de información a casi toda la comunidad de color no solo a los latinos. Me imagino que hay mucha gente que no utiliza todos los bienes que la ciudad ofrece”, agregó el primero de los pasajeros entrevistados.

Desde su puesta en marcha en 2017, las diferentes rutas de ferry han dado servicio a más de 12 millones de personas. Pero los elevados subsidios que ha recibido de la Administración de Blasio contrastan con el uso masivo de otros medios de transporte. 

El Contralor Scott Stringer comentó sobre los hallazgos del reporte a través de un comunicado en el que dice: que si la ciudad quiere que el sistema del ferry crezca debe tomar medidas para que el servicio llegue a todos los neoyorquinos

El alcalde de Blasio ha defendido siempre el ferry como una opción para los neoyorquinos de clase trabajadora. 

Dina Aponce, que sube al ferry con regularidad, está de acuerdo en que ayuda a quienes trabajan en la ciudad a llegar más rápido. 

“Hay muchas opciones en la 'guagua', tren a pie y en carro también. Es 2.75 por eso es que la gente viene ahí y deja su carro y se va para el trabajo es más rápido”, dijo Aponce.

NYC Ferry indicó que el objetivo es que todos los neoyorquinos tengan un acceso igualitario al servicio y destacó que los subsidios por trayecto han ido disminuyendo progresivamente.