En Midtown, Manhattan una enérgica práctica de Jiu Jitsu para defensa personal tiene un aire diferente, con toque femenino.

"Nunca se sabe quién está caminando en las calles de New York y siempre es mejor estar lista y tener confianza en uno mismo para protegerse", explicó la joven Zaybad Dahner, estudiante.

Cristian Montes es el profesor, un ex campeón de artes marciales M-M-A. quien trajó recientemente a Nueva York "Gracie Jiu jitsu", con el que enseña a mujeres el arte marcial brasileño. Su misión como emprendedor y dueño de "Ronin Athletics" es empoderar a las mujeres.

"Son 20 clases mientras desarrollas los reflejos; las habilidades para poder defenderte realisticamente es algo que es bien fácil", dijo Montes.

Según recientes estadísticas del Departamento de la Policia, las agresiones sexuales han ido aumentado en Nueva York. Comparado al 2018, hay un aumento del 6 por ciento. 

Y ¿qué hacer en caso de una violacion de un robo de que alguien conocido o desconocido quiera secuestrarte ultrajarte? Más que usar la fuerza hay que ser muy inteligente y usar la táctica.

"¿Qué harías sino sabe jiujitsu? Más fuerte...exacto...pero si sabes jiujitsu...un movimiento bien simple (para zafarse), dijo Montes al explicar algunas de las técnicas. "Con Jiu Jitsu la defensa es escapar".

Cristian asegura que la mejor manera de ponerse a salvo cuando alguién quiera llevarte en contra de la voluntad es crear una  base con tus pies...haciendo un  angulo de 45 grados con el que estarás en una posicion fuerte y no lograrán arrastrarte. 

Esta práctica milenaria promulga evadir el peligro con la agilidad y la inteligencia necesarias para mantener al agresor tan lejos o tan cerca posible. Y si el sometimiento es tal que no puedes moverte...habra que conservar la calma.

 "Le dices ya no voy a pelear...voy a cooperar no me lastimes, entonces estás engañándole", agregó Montes.

"Aquí coges a mi trícep, mi codo y ahora no puedo jalar..."

Son tan solo algunas de las tecnicas que a Lizeth y otras 40 mujeres recibieron en una clase gratis y ahora se siente menos vulnerable, más segura. 

"Si te hacen algo tu ya sabes como defenderte y a mi me enacanto eso", dijo Lizbeth Totasi, otra estudiante.